Las diversas actividades agrícolas, ganaderas, industriales y recreacionales al ser humano han traído como consecuencia la contaminación de las aguas superficiales con sustancias químicas y microbiológicas, además del deterioro de sus características estéticas. Para hacer frente a este problema, es necesario someter al agua a una serie de operaciones o procesos unitarios, a fin de purificarla o potabilizarla para que pueda ser consumida por los seres humanos.
Una planta de tratamiento es una secuencia de operaciones unitarias, convenientemente seleccionadas con el fin de remover totalmente los contaminantes microbiológicos presentes en el agua cruda y parcialmente los físicos y químicos, hasta llevarlos a los límites aceptables estipulados por las normas.
El curso tiene como objetivo que los participantes logren diseñar una planta de agua para consumo humano de tipo convencional usando criterios estandarizados.